PASEOS DE GREETERS
Con Frank sabrás todo sobre Haussmann, lo verdadero, lo falso...
Nos hemos citado frente al majestuoso león de la plaza de la República, una criatura de bronce helado dispuesta a guiarnos por los vericuetos de la arquitectura haussmaniana del bulevar Voltaire.
Con Frank, lo descubrirá todo sobre Haussmann, lo real, lo falso y, sobre todo, el misterio de la arquitectura que se despliega majestuosa entre République y Nation. Frank es un narrador sin igual, un verdadero encantador de las calles parisinas, capaz de revelar los secretos bien guardados que se esconden tras esas fachadas haussmanianas que parecen tan familiares, pero que ocultan tantos misterios.
Se dice que las arterias de Haussmann se diseñaron para evitar disturbios y barricadas, pero Frank le mostrará con pasión que el alma misma de París se encuentra en las callejuelas que serpentean entre los bulevares, ofreciendo refugio a los paseantes en busca de encanto e historia. Le hablará de la transformación radical de este barrio, antaño obrero, en símbolo de la burguesía del Segundo Imperio, pero también le revelará las historias de resistencia y de luchas obreras que han dejado aquí su huella.
Con Frank, cada calle se convierte en un capítulo de la historia de París, y cada edificio en una página de este libro de arquitectura y emoción.
Las hermosas puertas de los edificios Haussmann son como guardianes silenciosos de un pasado elegante.
Cada una de ellas cuenta una historia y es testigo de la época dorada de la Belle Époque parisina.
Cada una parece susurrar: "Bienvenido a nuestro mundo, donde la elegancia y el refinamiento son las consignas, donde el pasado y el presente conviven en armonía".
Le Bataclan, la emblemática sala de conciertos del Boulevard Voltaire, ha quedado marcada para siempre por la tragedia que allí tuvo lugar. El 13 de noviembre de 2015, durante un concierto de Eagles of Death Metal, islamistas armados entraron en el recinto sembrando el terror y la destrucción. Las imágenes de aquella trágica noche permanecen grabadas en nuestra memoria colectiva. Pero el Bataclan, símbolo de la música y la cultura, no se dejó vencer por la oscuridad de aquella noche.
La plaza de May Picqueray es un remanso de paz en el corazón de la ciudad. Pero también lleva el peso de la historia y la tragedia. Una discreta placa, casi oculta entre la vegetación, recuerda a las víctimas del cercano Bataclan. Esta placa da testimonio de la resistencia y la solidaridad que surgieron tras los trágicos sucesos de noviembre de 2015. Es un recordatorio de que, incluso en las sombras de los árboles, la luz de la memoria y la esperanza sigue brillando.
Iglesia de San Ambroise
La iglesia de Saint-Ambroise se convierte también en un santuario de la memoria, un lugar donde los visitantes pueden meditar, recordar y encontrar consuelo.
Terminamos este primer tramo del Boulevard Voltaire frente a un establecimiento para amantes de los felinos. "El café del gato"